¿Ilusión vs realidad? 

Aún puedo recordar como alrededor de los cinco años pensaba que todo giraba alrededor de mí; y que solo con pedir, insistir y en el último de los casos llorar, lograba mucho de lo que quería (es penoso confesarlo). Ahora veinte años después puedo decir que desde el escalón de los 25 la vida se ve diferente, a estas alturas algunas ilusiones son realidad y muchas otras, de ilusión pasaron a desilusión. He aprendido que aunque me duela no puede pasar todo lo que deseo o simplemente no cuando quiero.

Me muevo mucho por el «feeling», hasta cierto punto sé que es parte del diseño de Dios para mi vida pero el Señor me está enseñando que mi motor principal debe ser Él mismo a través de Su Espíritu.
Corrie Ten Boom, sobreviviente del régimen nazi (recomiendo que veas o leas su testimonio en «El Refugio Secreto»), escribió: «Nuestra fe percibe lo que es real y verdadero; nuestros sentidos perciben únicamente lo que está limitado por las tres dimensiones y comprendido por nuestro intelecto. La fe va mucho más allá».
 realidad
Actualmente Dios ha estado hablando a mi corazón sobre la verdad que es Cristo. El se define a sí mismo como la Verdad. «Yo soy el camino la verdad y la vida, nadie viene al Padre si no es por mí.» (Juan 14:6)
Mi fe debe estar fundada en Él, no puedo estar limitada a mis sentimientos porque de esa manera voy a cambiar constantemente en lo que creo. La fe es mucho más real que nosotras mismas. De esa manera podemos personalizarnos de la definición bíblica de fe, la cual dice: fe es la certeza de lo que se espera y la convicción de lo que no se ve. (Hebreos 11:1)
La certeza es el conocimiento claro y seguro de algo.
La convicción es tener razones o creencias que te permiten sostener un pensamiento o acción.
¿Cómo podemos conocer de manera clara y segura a Dios? A través de Su Palabra. «Toda Escritura es inspirada por Dios, y útil para enseñar, para redargüirse, para corregir, para instruir en justicia.» (II Timoteo 3:16)
Cuando lo último que quisiéramos es que nuestra realidad fuera real debemos sostenernos en Cristo, recordando que los planes de Dios son mejor de lo que por nosotras mismas pudiéramos planear. «Yo sé los planes que tengo para ustedes, dice el Señor, pensamientos de paz y no de mal para darles un futuro y una esperanza.» (Jeremías 29:11, NBH)
¿Cómo puedo encontrar un balance para que los sueños y aspiraciones no se conviertan en caprichos?
Lamento informales que en este escrito no lo van a descubrir, pero… les paso el dato de dónde podemos ser dirigidas de manera personal. Es a través de nuestra comunión con Dios donde podemos ser guiadas a descubrir el balance perfecto para nuestra vida. Pero, ¿cómo? Sí, como cuando quieres conocer más de una persona, ¿qué haces? ¡Pasas tiempo con ella! Pasar tiempo en la Palabra de Dios, en oración y OBEDECER, nos hará sensibles a la voz de Su Espíritu.
Noemí en su escrito Cuando Dios está contigo nos habla sobre la vida de José, un chavo lleno de sueños, tanto que hasta ahora es conocido como: «José el Soñador». Después de la etapa de ilusión se enfrentó a realidades no muy lindas pero al final todo el sufrimiento tenía un gran propósito.
En Morir para después vivir, Valeria nos recuerda como Dios tiene procesos y tiempos para cumplir Su plan en nuestras vidas. Cuando estamos en Cristo la ilusión y la realidad no se enfrentan, simplemente son herramientas divinas usadas en el tiempo correcto para nuestra dirección.

«Te haré entender, y te enseñaré el camino en que debes andar; sobre ti fijaré mis ojos». (Salmo 32:8)

Tenemos como Dios a un buen maestro, que en su fidelidad utiliza diferentes recursos para guiarnos. Él se puede prestar de anhelos o de inalterables para cumplir Su plan.
Con cariño,
-Vanessa-

Un comentario Agrega el tuyo

  1. Mariana Alemán dice:

    Gracias Vane, me resaltó este párrafo » Cuando estamos en Cristo, la ilusión y la realidad no se enfrenta, simplemente son herramientas divinas usadas en el tiempo correcto para nuestra dirección».

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